Huélamo, testigo de la historia.

En un pequeño recorrido tendremos la ocasión de visitar la preciosa localidad de Huélamo, desafiante de la gravedad adherida a la falda de una ladera y coronada por una espectacular peña, donde podremos  contemplar el urbanismo y la arquitectura propios de la Serranía, y visitar los vestigios de la antigua fortaleza árabe, al tiempo que disfrutaremos de un magnífica vista del valle del Río Júcar en su curso alto. 

Un entorno privilegiado que no es ajeno a la mano del hombre.

Partiendo de la Fuente de la Tía Perra y la antigua Casa Forestal del Cerviñuelo transcurre entre un bosque representativo de la gran diversidad florística del Parque Natural, pinares, quejigares, sabinares, destacando la zona adehesada de la Dehesa de los Olmos, con reseñables quejigos y arces que en época otoñal nos ofrecen un espectaculo de colorido inolvidable.

Tiene la posibilidad de hacer un recorrido corto, más apto para los visitantes con menor fondo físico.

Las Fuentecillas y Los Callejones

Una agradable ruta representativa de los recursos florísticos y geomorfológicos del Parque Natural. Pasearemos entre magníficas masas de quejigar y pinar, encontrando representación de la vegetación eurosiberiana. Al tiempo, podremos disfrutar de la grandeza de los farallones, bajo los que transitaremos al inicio, para posteriormente situarnos por encima de ellos, desde los que tendremos unas vistas espectaculares del valle del Río Júcar. Finalmente el sendero contacta con Los Callejones de Las Majadas, con su espectacular lapiaz caprichoso en formas pétreas. 

Descubra los recursos del Parque Natural junto al Río Escabas.

En un entorno privilegiado al que se accede remontando el curso alto del Río Escabas, una pequeña ruta jalonada de paneles interpretativos de todos los recursos naturales del Parque nos permitirá disfrutar de una inolvidable jornada en la naturaleza.

Todo ello rodeados de las magníficas masas de pinar que pueblan el valle de este río, delimitado por espectaculares formaciones geomorfológicas de orígen kárstico: cañones, escarpes y especial mención al Lagunillo que da nombre al paraje y que no puede dejar de visitarse.

Altas cumbres. Encrucijada de ríos.

En este recorrido tenemos la oportunidad de transitar por tres de los espacios naturales protegidos emblemáticos de la provincia y la región, los dos Parques Naturales de mayor extensión de Castilla-La Mancha, el del Alto Tajo y el de la Serranía de Cuenca, y el Monumento Natural del Nacimiento del Río Cuervo.

El itinerario nos conduce desde las proximidades de la localidad de Tragacete hasta la cumbre de una de las alineaciones montañosas más elevadas de la provincia, el Cerro de San Felipe, testigo de la divisoria de las vertientes hidrográficas atlántica y mediterránea de la Península; así las aguas de la vertiente Sur tienen su destino en el Mar Mediterráneo a través del Río Júcar, cuyo nacimiento se encuentra a escasa distancia, mientras que las de la vertiente Norte emprenden un largo camino hacia el  Océano Atlántico a través de los ríos Tajo y su afluente Cuervo.

En el recorrido transcurriremos entre prados y frondosos pinares de pino albar, con un rico acompañamiento florístico arbóreo y arbustivo. Desviándonos unos pocos metros del recorrido accederemos a la cima del Cerro de San Felipe, desde donde se tiene unas privilegiadas vistas de las depresiones del Tajo y del Júcar así como de los Montes Universales. El sendero finaliza a escasa distancia del recorrido de la  visita al Nacimiento del Río Cuervo, con sus espectaculares cascadas travertínicas de elevado valor geomorfológico y paisajístico.