RUTA 1:Nacimiento del Río Ungría
Esta ruta circular y sencilla, para toda la familia, parte de Fuentes de la Alcarria y tiene una longitud de 3 km. El vehículo se puede dejar en la plaza del pueblo y allí se encuentra el cartel de inicio con información del recorrido.
Fuentes de la Alcarria destaca por sus espectaculares vistas paisajísticas al Valle del Ungría, cuenta con restos de su muralla, una picota del siglo VXI y su iglesia parroquial.
Para hacer la ruta en el sentido de las agujas del reloj, se atraviesa el arco y se toma la calle de la izquierda que es en sí un balcón natural del valle.
Desde aquí, siguiendo las marcas blanco-azules, descenderemos justo hasta el nacimiento del río Ungría, una pequeña charca a la izquierda del sendero, a continuación de un bosquete de grandes ejemplares de chopos cabeceros (Populus nigra) que se trasmochaban para forraje para el ganado.
Una indicación nos señala el camino hacia la Fuente de los Huertezuelos, ahora sin agua, a unos 20 minutos de ascenso y vuelta. Lo interesante de este pequeño recorrido es poder adentrarse en un bien conservado y umbroso bosque de quejigos (Quercus faginea) de gran porte y madurez.
Si se continua por este ramal del sendero hasta la parte alta de la alcarria, llegamos a la zona de cultivos de lavanda, cuya espectacular floración se produce en los meses de junio y julio. De vuelta al fondo del valle por el mismo camino, la ruta continua por la pista llevando el río Ungría a mano derecha hasta el Molino de Fuentes. Desde aquí, la ruta vuelve hacia Fuentes de la Alcarria adentrándose en una senda a media ladera.
La ruta comienza en Fuentes de la Alcarria. En la plaza se puede dejar el vehiculo y alli encontraremos un panel informativo con toda la información de la ruta.
Está PROHIBIDO hacer fuego, acampar, circular con motos de trial, enduro o quad, recolectar elementos naturales, fumar en verano y arrojar basuras.
En el recorrido de los senderos, debe respetar su trazado, vigilar a los niños, llevar calzado adecuado y prestar atención a las crecidas de los arroyos y ríos.
Aparque el vehículo solo en zonas autorizadas, disfrute de los pueblos del valle y adéntrese a pie en el paisaje protegido.